El primer paso en una partida de República Bananera será elegir el presidente y para eso ayuda ser el jugador con menos estudios o con el currículum más falso. Después, se reparten 11 cartas blancas a cada jugador. El presidente será el encargado de sacar una carta rosa con un espacio que tendrá que rellenarse con el contenido de las cartas blancas que aporten los demás jugadores.
De forma unilateral, el presidente elige la carta más divertida y disparatada y el propietario de esa carta blanca seleccionada gana la ronda. ¡El jugador que gane siete rondas, se llevará la victoria!. República Bananera es un juego totalmente gamberro e irreverente que arrancará carcajadas a todos los participantes. Sin duda, ¡tu arma secreta para una velada con amigos!.