El jugador de más edad recibe la carta de chinche guardián y lo coloca boca arriba delante de él. Cada jugador recibe ocho cartas boca abajo y las restantes se colocan en una pila en el centro de la mesa. Se le da la vuelta a la carta superior de la pila y se coloca boca arriba al lado como pila de descartes.
A partir de ahí, siguiendo una serie de reglas, te vas liberando de tus cartas aunque hay una que no podrás descartar, la carta de La Polilla Tramposa. Busca un plan b para deshacerte de ella pero ten mucho cuidado, ¡el chinche guardián no puede pillarte!.
Componentes: •20 cartas de acción, •43 de números, •8 de polillas tramposas.
Polilla Tramposa te ofrece partidas “moviditas” de unos 20 minutos y es para 2-5 jugadores a partir de 7 años.