Abalone parte de una idea simple en cuanto a movimientos y reglas, pero realmente rica por su número de combinaciones. Eso lo convierte en un juego verdaderamente versátil que se adapta a cualquier ambiente de juego: padres con hijos, experimentados jugones o recién aterrizados en el mundo de los juegos de mesa.
El tablero de Abalone está formado por 61 huecos circulares distribuidos hexagonalmente. Cada jugador tiene 14 canicas que se encajan en los huecos y que comienzan el juego distribuidas en su lado del tablero. El juego se desarrolla por turnos alternativos. Cada jugador puede realizar un movimiento por turno, que puede ser “en línea” o “lateral”, en el que pueden moverse hasta un máximo de 3 canicas.
Para que puedas empujar las canicas del oponente, éstas han de estar adyacentes a las tuyas. Sólo se pueden empujar las canicas del oponente si el número de canicas que se mueven en línea es mayor que el de las canicas empujadas (de esta manera, dado que el máximo de canicas que se pueden desplazar en un movimiento es de 3, nunca se podrán desplazar más de 2 canicas del oponente).
Para que el movimiento se considere válido, las canicas desplazadas deben poder situarse en un nuevo hueco o bien ser expulsadas del tablero. Es decir, si el desplazamiento obliga a mover también canicas de tu propio color, será una acción no válida. El jugador capaz de expulsar 6 canicas del oponente del tablero será el vencedor. Abalone es un adictivo juego de estrategia para 2 jugadores a partir de 7 años. Las partidas son ágiles y duran unos 20 minutos apasionantes.
Contenido: •14 piezas negras, •14 piezas blancas, •1 tablero, •1 Reglamento
